Frigiliana es un municipio de la provincia de Málaga, en la comunidad autónoma de Andalucía, España. Se encuentra situado en la comarca de la Axarquía, la región más oriental de la provincia, e integrado en el partido judicial de Torrox. El término municipal limita al norte con el municipio de Cómpeta; al oeste, con Torrox; y al sur y el este, con Nerja. Accesible desde el Aeropuerto de Málaga-Costa del Sol a través de la autovía del Mediterráneo (A-7) en dirección Almería, a unos 60 kilómetros de distancia.
En el Parque Natural de las Sierras de Almijara, Tejeda y Alhama, se descubre, asomada al Mediterráneo, la Villa de Frigiliana, con una población aproximada de 3.000 habitantes. A trescientos metros sobre el nivel de mar y con un microclima subtropical, surge, como despertando del pasado, su elogiado y premiado Casco Histórico, de herencia morisca, donde las calles estrechas, sinuosas y empinadas, los pasadizos, adarves y revellines forman un singular entramado urbano de pequeñas casas que se encaraman unas sobre otras.
Frigiliana cuenta con una amplia gama de servicios turísticos para satisfacer la demanda del visitante. Una variada gama de alojamientos (establecimientos hoteleros, apartamentos tcos. y casas rurales) y un buen número de restaurantes que ofrecen todo tipo de variantes de la cocina local, nacional e internacional. El choto frito en salsa de almendras, los variados potajes de verduras frescas, mención destacada merece el potaje ,las migas…son algunos de los platos típicos de la cocina autóctona, todo ello elaborado con aceite de sus olivares y regados con los ricos caldos moscateles de sus viñedos.
Algunas tradiciones artesanas autóctonas perviven en Frigiliana, y materiales como el esparto, las calabazas de agua, la cera, el cristal, la arcilla, madera o lana se convierten en bellas obras de singulares acabados que pueden adquirirse en los comercios del Casco Histórico. Frigliana celebra sus fiestas patronales el 20 de enero (San Sebastián) y el 13 de junio (San Antonio), ésta última coincide con la Feria, de entre cuyos actos destacamos la Romería, por su especial interés al conmemorar la victoria cristiana sobre los moriscos en junio de 1569.
Entre las tradiciones de carácter religioso, la celebración de la Semana Santa, goza de un gran prestigio en un ambiente de gran respeto y recogimiento que se acentúan durante la procesión de la soledad, (el Viernes Santo), en la que suelen participar las mujeres rigurosamente vestidas de negro en un recorrido por el casco antiguo acompañando e iluminando con sus velas el camino de la Dolorosa.
Entre sus monumentos destacamos: Palacio de los Manrique de Lara y Condes de Frigiliana.conocido también como, Trapiche o Ingenio del Conde de Frigiliana, casa señorial cuenta con unos 2.000 m2 sustentada sobre gruesos muros y dispone de una portada de sillería, arcos, columnas, galerías y subterráneos. Construida a finales del siglo XVI, la obra es atribuida a Diego de Sousa, cuñado del primer Marqués de Frigiliana . Ermita del Santo Cristo de la Caña o del Ecce Homo, del siglo XVII, cuenta con una sola nave cubierta por una armadura sencilla de par e hilera.
El casco antiguo de Frigiliana, de origen morisco-mudejar, es sin duda uno de los mejor conservados de toda la provincia. Pasear por él, a cualquier hora del día, aunque muy especialmente por la noche, nos transportará en el tiempo a épocas pasadas, dejando de lado ruidos, vehículos circulando a nuestro lado, prisas, y en definitiva, todo aquello que vemos como habitual en nuestra vida cotidiana en la ciudad. El conocido como Barribarto le deslumbrará de día por el reflejo del sol en sus siempre impolutas y encaladas fachadas, mientras que por la noche se verá inmerso en un ambiente silencioso.