Alquézar o Alquezra en aragonés es un municipio de la comarca Somontano de Barbastro, en la Provincia de Huesca, Comunidad Autónoma de Aragón, España. Está situado en la margen derecha del río Vero, en su último cañón, al pie de las sierras de Balcez y Olsón. Dista de Huesca 51 km. Cuenta con una población de 302 habitantes. Debe su nombre al castillo o Al-Qasr construido para defender el acceso a la capital de la Barbitanya.
Entre profundos barrancos de la Sierra de Guara, excavados pacientemente por las aguas del río Vero, se alza el casillo colegiata de Santa María la Mayor, y a sus pies el laberíntico caserío medieval de la monumental villa de Alquézar declarado Conjunto Histórico Artístico. Roca, agua, historia, arte y leyenda se funden en Alquézar, formando un universo sorprendente, único, inesperado, en el que es posible retroceder en el tiempo mientras se recorren sus estrechas callejuelas, se atraviesan las puertas de la muralla, se escuchan viejas historias de moros y cristianos...
La villa de Alquézar se localiza en el último tramo del cañón del río Vero, en un entorno paisajísticoimpresionante, que ofrece múltiples alternativas a los amantes de la naturaleza y los deportes de aventura: espeleología, escalada, excursiones a caballo o en bicicleta... Además de practicar el descenso de barrancos pueden realizarse numerosas rutas senderistas. Entre ellas cabe citar la que, partiendo de la fuente de Monchirigüel y descendiendo por el Barranco de la Fuente, permite recorrer el último tramo del majestuoso cañón del Vero; siguiendo el sendero perfectamente acondicionado es también posible descubrir fuentes, azudes, molinos y puentes, que ilustran el intenso aprovechamiento del agua del río Vero a su paso por Alquézar desde la época medieval.
Desde este mirador obtenemos una primera visión panorámica de la monumental villa de Alquézar y del ultimo tramo del profundo cañón del río Vero, antes de que sus aguas, tras abandonar la Sierra de Guara, se adentren en las fértiles y dulces tierras de los somontanos. En lo más alto de una roca solitaria rodeada por profundos barrancos, se alza la inexpugnable fortaleza, levantada por los reyes cristianos después de haber sido arrebatada a los musulmanes en el siglo XI. A comienzos del siglo IX Jalaf ibn Rasid levantó sobre la peña un primer castillo, con el fin impedir que la resistencia cristiana del vecino condado de Sobrarbe accediera a la Barbitanya.
En la Calle Pedro Arnal Cavero y poco antes de alcanzar la porticada Plaza Mayor, se encuentra la pequeña ermita de Nuestra Señora de las Nieves. Es de una sola nave de tres tramos cubierta con bóveda de crucería estrellada, en la que se conserva un pequeño retablo formado por fragmentos de otros ya desaparecidos, tanto renacentistas como barrocos. Su fachada fue edificada por canteros del siglo XVII siguiendo modelos de la arquitectura religiosa popular. Junto a la ermita puede verse una jamba perteneciente a una antigua puerta hoy inutilizada y en la que aparecen grabadas las siluetas de dos zapatos. Tal vez fue éste el lugar en el que ejerció su oficio algún zapatero que ya nadie recuerda.
Después de atravesar la Plaza Mayor para continuar por la Calle de la Iglesia, debemos tomar la primera calle a la izquierda, por la que se accede a la fuente de Monchirigüel tras descender por unas escaleras de piedra. Se trata de una fuente construida en el siglo XVI que, con elementos decorativos renacentistas, ostenta el escudo de la villa de Alquézar. Desde este lugar puede disfrutarse de una espectacular imagen de la Colegiata, encaramada a la peña calcárea y desafiando el vacío que se abre a sus pies.